La fotografía nocturna o de larga exposición

Lógicamente, depende de lo que queramos fotografiar, pero deberemos de mantener la ISO lo más baja posible (de lo contrario tendremos ruido) y el diafragma abierto. El obturador, en bulb, y a partir de ahí, practicar las capturas con diferentes elementos nocturnos. 

Obtener una buena fotografía de la Luna, aparentemente inmóvil, es un buen objetivo para comenzar, y todo un reto.  

Las mejores horas para obtener fotografías nocturnas impresionantes son el atardecer y el amanecer. Si quieres capturar el brillo de las estrellas o la luz del centro de la vía láctea, deberás de hacerlo durante la noche cerrada. 

Con la fotografía de larga exposición,  podemos capturar  algo que siempre se nos escaparía con la convencional: el tiempo. ¿Qué precio tiene poder jugar con el recorrido de la luz? Las posibilidades, respecto a la composición, son doblemente infinitas, aunque todos sepamos que el infinito no pueda doblarse. Además, para obtener fotos nocturnas originales con objetos móviles iluminados, como por ejemplo, automóviles, deberás de prever el movimiento de los mismos, por eso tu intuición y creatividad en este estilo, son esenciales.  

¿No te apasiona la idea de inmortalizar en una imagen una fracción del tiempo? Atrévete y ponte manos a la obra.