Euroscola ya se ha convertido en una actividad habitual entre los escolares de algunos centros de nuestra ciudad. Hoy quiero centrarme en los alumnos del Colegio Sagrada Familia, más conocido como “Las Josefinas”, que fieles a la cita vuelven un año más a poner su granito de arena en Europa y, quién sabe, si volverán a ganar como llevan haciéndolo los dos últimos años.
Pero ¿qué es Euroscola? Un concurso a nivel europeo en el que los participantes son estudiantes de entre 15 y 18 años y que cada año su objetivo es dar a conocer algún elemento aglutinador de Europa. En esta ocasión, la Oficina de Información del Parlamento Europeo en España, en colaboración con la Representación en España de la Comisión Europea, la Secretaría de Estado para la Unión Europea (Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación) y con la contribución especial de la Embajada de Italia, centran la edición en el 60 aniversario de la firma del Tratado de Roma (1957- 2017), cuyo tema central será, por tanto, conocer la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea como texto que recoge los principios y valores de los pueblos y ciudadanos de la UE.
Los alumnos de este centro han trabajado tres temas que se han ido convirtiendo en el eje de nuestras vidas: la desigualdad hombre-mujer, la integración social de personas con discapacidad y el derecho de asilo político y no discriminación por razones ideólogas y religiosas. Pero quiero centrarme en uno de ellos, eso sí, sin quitar el valor que merecen los demás.
Diez adolescentes de 15-16 años decidieron fijarse sus objetivos entorno a la integración social de las personas con discapacidad (artículo 26. La Unión reconoce y respeta el derecho de las personas discapacitadas a beneficiarse de medidas que garanticen su autonomía, su integración social y profesional y su participación en la vida de la comunidad) ¿De dónde nace su interés por este artículo en concreto? Tras conocer una noticia sobre una mínima representación de personas con capacidades diferentes en el Europarlamento, les chocó que en pleno siglo XXI donde se apuesta por la plena integración laboral y en una institución como ésta fuera tan bajo el número de personas discapacitadas ejerciendo diversas funciones.
Echaron un vistazo al panorama de integración en la ciudad, al alto número de asociaciones, así como de actividades que las mismas realizan, y decidieron que éste sería su centro de estudio. Tal es así que han participado en actividades con miembros de COCEMFE, ASPACEBA, APNABA, Colegio de la Luz, MIDEBA, han visitado un concesionario para conocer de cerca cómo son los coches adaptados y continúan esta semana. Pero no solo las asociaciones decidieron vincularse con estos chicos, también nuestros políticos; el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, recibió a estos jóvenes e intercambió ideas sobre el trabajo que están llevando a cabo; el alcalde la Badajoz, Francisco Javier Fragoso, compartió una mañana con alumnos y profesores conociendo de primera mano las inquietudes de estos chavales y los conocimientos que estaban adquiriendo. Y esta semana, hasta el último momento, seguirán charlando con otros políticos, visitando más asociaciones y participando de sus actividades con sus miembros.
Como todo concurso Euroscola tiene su recompensa, los ganadores viajarán a Estrasburgo y participarán en una jornada en la sede del Parlamento Europeo, junto a otros jóvenes de toda la Unión Europea.
Pero la mayor recompensa no es material, como alguno de sus miembros me contaba, “esto va más allá, hemos aprendido, hemos vivido experiencias que si no llega a ser por este proyecto no hubiéramos experimentado nunca, nos hemos sentido parte de estas asociaciones, incluso nos hemos planteado colaborar activamente. Y, lo más importante, hemos conocido de primera mano cómo la sociedad ha avanzado pero aún queda mucho por hacer y está en nuestras manos conseguirlo”.
Sin duda este concurso es más que eso, hace personas, los jóvenes de hoy que serán los adultos del futuro, quizás alguno llegue a sentar el día de mañana en la bancada del Parlamento Europeo.
Suerte en el camino.
