Mensajes en una botella

Señores, esto está que arde, ¡qué nervios! Oigan, por todos los lados, en cada lugar por una cuestión distinta, menuda efervescencia, ni la del alka-seltzer con burbujitas que se bebe para hacer bien las digestiones. Aunque ahora se prefiera el whiskito, ya lo sé, que el otro día en una reunión de amigos, los vasos altos iban y venían con propiedad.

Se "lleva" ser espontáneo y decir lo que se piensa, vamos lo qué se le viene a uno a la boca o al pensamiento. Tal parecieran medio tontos los prudentes, aquí m... el último (que diría el castizo). Por cuestiones estrictamente personales he viajado a Madrid. Sigue estando muy bonita, los comercios de la Gran Vía abarrotados, con la gente entrando y saliendo de las tiendas; las colas en las entradas de los Museos (la exposición de El Bosco en el Prado se lleva la palma); los jóvenes en los Starbucks charlando distendidamente; los grupos musicales actuando en plena Plaza de Callao...Llegas a la conclusión de que las personas han decidido vivir, pasear, amar...independientemente de lo que hagan otros, trayéndole al pairo el gobierno de turno...

Ahora que, afortunadamente, la campaña vasca se está realizando con normalidad, recuerdo a una colega en el Congreso cuando (en plena virulencia del conflicto) intentaba explicarme la complejidad de lo que en el País Vasco ocurría: "Carmen -me dijo- lo endiablado de todo estriba en que las cuestiones se entremezclan, en la cuadrillas de mis hijos hay chavales que puede que después de merendar en mi casa salgan a la kale borroka..."

Afortunadamente, la paz es un hecho y los más y menos jóvenes han decidido pasar página, aunque pequen de ingratitud con quienes la lograron. Los mensajes (de cuánto ocurrió) deberán ser guardados en botellas, para que andando el tiempo alguien las encuentre y la memoria no se borre.

Vuelves a Extremadura por una carretera sin casi tráfico e intuyes el "retraso" en la quietud de esas vías, en ciertos comportamientos y decisiones, en la escasa luz real de algunas calles dentro de una localidad cualquiera. Hay mucho coche, eso sí, en El Cuartillo, un parque en terrenos de la Diputación, dónde se está celebrando una convivencia de moteros.

Y claro que además te gustaría mayor brillantez por cualquier sitio, mayores iniciativas comunes, mejores carreteras y ambiciones más fuertes de la mayoría, para conseguir logros comunitarios. Un poco más de sentimiento de raza para los asuntos importantes, en suma... Pero no, la quietud lo inunda todo, la primera la de las piedras, la más notable, tal que inunda y confluye en todas las otras...

En la radio hablan de vikingos y de los ritos usados en sus funerales, esas piras de fuego en las que se convertían los cuerpos colocados en los barcos. ¡Ay!