¿Conoce las señales de alarma del ictus?

¿Qué es?

El ictus, o accidente cerebrovascular, es una interrupción del flujo sanguíneo a cualquier parte del cerebro que puede darse en dos formas diferentes:

Porque se interrumpa el flujo de sangre debido a un taponamiento (coágulo) en el vaso sanguíneo. (Ictus isquémico)
Porque se rompa el vaso sanguíneo (hemorragia) y la sangre no llegue a una zona determinada. (Ictus hemorrágico)

Esto hace que aparezca una alteración en la función de esa zona del cerebro.

¿Cuáles son los signos de alarma?

Pérdida de la fuerza: en la cara, brazo y/o pierna de un lado del cuerpo, de inicio brusco.
Alteración repentina de la visión: ya sea en uno o ambos ojos.
Trastornos de la sensibilidad: sensación de acorchamiento u “hormigueo” en la cara, brazo o pierna, de inicio brusco.
Alteración repentina del habla: problemas para expresarse ya sea al hablar o al entender a otros.
Dolor de cabeza súbito: sin causa aparente y de intensidad distinta a lo habitual.

¿Qué HACER si sufro un ictus?

Avisar de inmediato al servicio de urgencias.
Avisar a alguien que pueda acompañarme.
Anotar la hora de inicio de los síntomas.

¿Qué NO HACER si sufro un ictus?

Esperar a que se pase solo.
Tomar aspirina o cualquier medicamento que crea que me lo vaya a quitar.
No avisar a nadie por no molestar.
Avisar al médico de cabecera para que me visite cuando él pueda.

¿Cómo puedo prevenirlo?

Dieta saludable y equilibrada.
Realizar ejercicio físico de manera moderada y regular.
Evitar estrés. Afecta al humor, tensión arterial, sistema inmunológico, resistencia a enfermedades cerebrales, bienestar emocional. A veces es bueno parar por un momento y disfrutar de las cosas buenas de la vida.
No fumar. Mejorará la capacidad pulmonar, disminuirá la tensión arterial y los riesgos de enfermedades cardiovasculares. Mejorará el gusto y olfato para disfrutar de nuestras comidas preferidas.
No abusar de alcohol. Sí, en pequeñas cantidades el vino tinto es saludable, pero no lo es abusar del alcohol ya que puede afectar a distintos órganos.
Descansar lo suficiente. Al menos 8 horas cada noche, permite mantener el cuerpo en condiciones óptimas.
Vigilar tensión arterial y colesterol. En revisiones rutinarias, pero sin obsesionarse (recuerde que el estrés continuo no es bueno).
Mantener un peso ideal. Nuestro centro de salud podrá orientarnos para saber en qué peso debemos mantenernos, y cómo hacerlo.
Ejercitar el cerebro. No solo hay que ejercitar los músculos del cuerpo, también es saludable entrenar nuestra mente (aprender idiomas, mantener conversaciones con variedad de opiniones, leer…). Aumentará la resistencia de nuestro cerebro frente a enfermedades.